domingo, febrero 24, 2008

A media luz

Que dolor!!! De cabeza, bha, no solo de cabeza, es un poco de todo. Pero es lo que se dijo al principio, lo que acordamos y está bien. Son las reglas del juego, lo que pactamos en un principio. Como siempre, las cosas se confunden un poco más de la cuenta y termina pasando cualquier cosa menos lo que arreglaste en un primer momento. Está en uno ponerse firme y hacerse cargo de lo que dice y lo que hace. Pero seamos sinceros, quien no ha dicho un poco más de lo que debía, ha hecho algo de lo que no esté orgulloso o se ha creído capaz de soportar la tentación de cosas que en realidad sabía que no podía.
Todos somos iguales, en algunas cosas lo somos. El inconveniente es que no somos capaces de hacer todo lo que decimos y deseamos, aun en cosas simples e insignificantes o baladíes. Y es esto lo que nos complica. No siempre logramos hacer las tareas más sencillas que buscamos, cuando estamos muy interesados en lograr el fin último de la acción nos concentramos en lo fino y nunca tejemos la estructura primordial de aquello que queremos lograr.
El dolor este es físico, pero no solo físico, hay de todo un poco, es la angustia, la decepción, la tristeza, el desapego, el desarraigo, la incertidumbre, la clarividencia y la ‘falta y abundancia’ de certidumbres lo que lo conforman y lo hacen ser como lo vemos, lo sentimos y lo sufrimos. No es nada más ni nada menos, es lo que hay y ya va a pasar, como a mí a todos, y lo triste es que a todos nos toca vivirlo, pero no todos lo superamos…